Santiago, 1 de agosto de 2017. Una serie de propuestas para enfrentar la crisis por la que atraviesa Tiltil formuló el candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami. Acompañado por dirigentes sociales de dicha comuna, la directiva nacional del Partido Progresista y el vicepresidente de la CUT, el presidenciable detalló cinco compromisos.
“Tiltil se define como zona de sacrificio sin confesarlo. Lo que ha hecho el Estado de Chile es definir regiones, comunas y localidades como zonas de sacrificio. En Tiltil no solamente hay una cárcel, no solo hay una planta de cerdos y un espacio para residuos, sino que además hay compatriotas que hacen vida en comunidad. Aquí están fallando muchas cosas, como la planificación urbana y el manejo de la basura en Chile”, señaló como introducción el candidato de los progresistas y los independientes.
Las cinco propuestas
En primer lugar, Enríquez-Ominami propuso que se debe legislar para que “el que produce la basura y residuos industriales se haga responsable de ello. Lo que está pasando hoy es que incluso desde miles de kilómetros de Tiltil quieren hacer llegar residuos. Ya 24 comunas de la Región Metropolitana dejan caer en Tiltil sus residuos. Cambiemos el paradigma”.
En segundo lugar, el candidato citó el modelo sueco, país en el que el 99% de la basura se recicla y menos del 1% de la basura doméstica termina en vertederos. “Debemos tener –a través de incentivos fiscales– una política educativa de reciclaje de la basura. En Suecia importan basura porque se convirtió en fuente de energía, fuente de prosperidad. Nuestro mal manejo de la basura expresa nuestra relación injusta con nuestros pueblos”. Actualmente, Suecia importa basura del Reino Unido, Italia, Noruega e Irlanda.
Enríquez-Ominami propuso, como tercera medida, la instalación de nuevas estaciones de monitoreo del aire. “Acompañemos a los ciudadanos de Tiltil con datos para saber cómo está el aire. Sabemos que los niveles de medición son precarios”, señaló.
El cuarto punto contempla hacer de Tiltil un plan de reforestación y áreas naturales para mitigar la contaminación producida por el vertedero. “Una política de reforestación es perfectamente posible, es compleja pero no es cara. Vitacura tiene más árboles y menos pobreza. Tiltil podría perfectamente tener una política especial de reforestación como compensación”, señaló el candidato.
Como última medida, el candidato propuso la creación de techos verdes. “Es lo que han hecho muchas ciudades de países desarrollados. En Chile tenemos recursos para eso con los ahorros y va a generar una mejor calidad del aire”, explicó.
Enríquez-Ominami resumió: “Si no hay políticas de compensación haré lo imposible como Presidente, dentro de la institucionalidad, para rechazar la instalación de nuevos vertederos. Modificaremos las leyes que producen asimetría entre el proyecto y el ciudadano. Aquí no se trata de territorios, se trata de seres humanos. Llamo a una gran revolución sobre el paradigma en manejo de la basura. La basura y los residuos pueden ser un factor de riqueza. Hay que cambiar esa visión”.
Otras voces
Edith Cortés, vecina y dirigente de Tiltil, apoyó las palabras del candidato. “Tenemos un montón de contaminación y nadie le ha tomado el peso. Yo le pedí a Marco que por favor me apoyara en esta causa porque estamos solos. Nadie nos ha apoyado. El Gobierno solo votó y nos dejó la media crema. Va a haber muchos enfermos, muchos niños y adultos mayores. Ya no se puede tomar agua, las áreas verdes pueden desaparecer”, señaló.
La dirigenta agregó: “Ya no me siento sola. Les he querido mostrar cómo estamos manifestándonos. La descarga de contaminación trasladado por camiones no nos va a afectar sólo a nosotros en Tiltil, sino que a muchas comunas por donde transiten. Los que votaron no pensaron en eso. El señor intendente, la gobernadora llegaron y votaron. ¿Hasta cuándo más basura? Esta es una lucha para nuestros hijos, no para nosotros”.
Por su parte, el vicepresidente de la CUT Fabián Caballero señaló: “Una de las concepciones de trabajo que tiene la Central y los trabajadores en general, es que este no se circunscribe solo al plano laboral, sino que a uno de carácter global. Nuestras tareas son dirigir y conducir la lucha política, social y económica en general de la comunidad. La situación de Tiltil es reflejo de la expresión más concreta de la hegemonía de la lógica de la alta rentabilidad y utilidades de la empresa, en desmedro de los aspectos humanos, donde las comunidades son vulneradas y despojadas de la dignidad para sus vida”.
Aborto y Tribunal Constitucional
En la ocasión, Marco Enríquez-Ominami fue consultado también por la petición de Chile Vamos para que el Tribunal Constitucional se pronuncie respecto de la ley de aborto en tres causales.
“La derecha siempre pierde las elecciones y cuando no tiene mayoría en el Congreso lo que hace es ir al Tribunal Constitucional y usa este tribunal contra mayoritario para detener las mayorías. En Chile somos mayoría los que no queremos cárcel para las mujeres. Aquí no se trata de estar por la vida o no. A mí y al PRO no nos gustan los abortos, pero yo propongo quitar la cárcel en el artículo del Código Penal. En eso la derecha es muy egoísta”, explicó.
Sobre el mismo punto, el candidato concluyó: “Yo entiendo que Piñera como líder de Chile Vamos esté sentado en un sillón comiendo cabritas disfrutando de la pelea de la DC y la centro izquierda, pero ahora no se trata de sacar ventajas, sino que se trata de las mujeres de Chile. Le pido a Sebastián Piñera que se pronuncie con claridad: si o no al aborto en tres causales. Nosotros decimos que sí”.