Como juventudes de oposición sensibles a las demandas sociales del pueblo chileno, nuestra preocupación esencial es el ser humano, siendo defensores de la preservación del desarrollo integral de este. Educación, salud (física y mental), trabajo, alimentación, etc. Son elementos indispensables para que toda mujer, hombre, niño y niña alcancen la plenitud de su desarrollo cognitivo, emocional, espiritual y físico.
Debido a la contingencia del Covid – 19 las desigualdades sociales que han afectado crónicamente a nuestro país se han profundizado aún más, en donde sólo unos pocos privilegiados han podido conservar formas de vida las cuales les permiten alcanzar el fundamental desarrollo integral, en cambio otros han sucumbido ante los efectos del desempleo, el desabastecimiento, la mala calidad de servicios básicos, problemas de salud de todo tipo, entre otros males.
Para el gobierno de inspiración individualista “neoliberal”, la austeridad en el plano económico es la solución a las problemáticas que han aquejado a chilenas y chilenos; nosotros y nosotras decimos fuerte y claro que austeridad no es la solución, por el contrario, es la inversión pública; pues el gasto nacional es igual al consumo nacional. Por ello es fundamental la protección del empleo y así contribuir al aumento del consumo por parte de la población.
Recordamos al gobierno y a los partidos oficialistas la servicialidad del Estado a la persona humana y la finalidad de las políticas públicas, el bien común; cada uno debe recibir según su necesidad.
Llamamos al Legislador y a la Administración a tomar las siguientes medidas:
Con la catástrofe declarada, la autoridad tiene la facultad y el deber político a obligar la distribución, uso gratuito u oneroso de bienes para la subsistencia de la población, previa instrucción presidencial.
Los bienes básicos indispensables deben ser objeto de la fijación más baja posible de precios, como también, en medida de las capacidades logísticas, garantizar su uso y distribución gratuita.
Dentro del marco de la legalidad de la Ley 18.168 General de Telecomunicaciones, el DFL 70 de Fijaciones de Tarifas de Agua Potable y Alcantarillado y la Ley de Servicios Eléctricos, la Administración debe aplicar sus Potestades Exorbitantes en los Contratos Administrativos para garantizar la cobertura y acceso de los diversos servicios básicos esenciales a la población.
La Comisión Resolutiva, creada por el decreto ley 211, de 1973, y los órganos similares deben declarar que no hay condiciones existentes suficientes para garantizar un régimen de libertad tarifaria, garantizando la fijación de precios como regla general en estos servicios durante el periodo de la crisis.
La CORFO que está mandatada por ley a ser la encargada de un plan de fomento de la producción nacional debe profundizar sus funciones recogidas en la Ley 6.640 y en el DFL 211 de 1960, aumentando la capacitación y créditos a las pymes y minipymes para mantener la productividad y la justa remuneración.
El Parlamento debe aprobar la propuesta de la Diputada Karol Cariola sobre el impuesto patrimonial de 2,5% a quienes poseen las mayores fortunas del país, lo cual permitirá poder crear una renta de unos $420 mil durante seis meses para cuatro millones de personas. Sin embargo, deberá reformar anteriormente el artículo 19 número 20 inciso 4 de la Constitución para permitir que dicho tributo sea afectado directamente al fin de sustentar y abastecer a esos cuatro millones de personas, extendiendo la hipótesis actual de la afectación a fines propios de la defensa nacional, para incluir la destinación directa de este tributo a la subsistencia y abastecimiento de la población en situación excepcionales como esta.
El Banco Central debe seguir sus funciones, pero debe evitar momentáneamente su búsqueda de proyectar la inflación en dos años a no más de 3%, comprendiendo la extrema necesidad de la inversión estatal y del tránsito del capital para la subsistencia de la persona y el desarrollo integral de la comunidad.
Hemos enfrentado de forma ineficaz la crisis, hemos agudizado la miseria de las personas, hay hambre, no podemos permitir más mezquindades ni juegos de las encuestas, es hora de propuestas y medidas concretas para el bienestar de la ciudadanía.
Llamamos a la Unidad Política y Social del pueblo superando la desintegración del tejido social y el individualismo, que los movimientos sociales, partidos y las autoridades refuercen la organización entorno a la comunidad, el cual es el espacio fundamental para el desarrollo integral de la persona humana y más aún en tiempos de crisis.
¡No más hambre!
Suscriben:
Jóvenes Izquierda Cristiana
Juventud Progresista
Juventudes Comunistas
Juventud FRVS
Estudiantes Humanistas
Juventud Socialista
Juventud PPD
Juventud Radical
Juventud DC