Mientras un número importante de chilenas y chilenos enfrenta serios problemas generados a raíz de la crisis por COVID – 19, que ha golpeado fuerte en la economía, el empleo y la salud de las personas, exacerbando aún más la brecha ya existente, Sebastián Piñera pone recursos, energía y equipo humano a trabajar en su “legado”.
La información acerca del regreso de Magdalena Díaz, quien fuera la jefa de gabinete de Piñera, con el mandato específico de elaborar el relato y los formatos mediante los cuales él espera dejar constancia de su segundo gobierno, así lo demuestra.
Al respecto, el presidente del partido progresista, Camilo Lagos, expresa que, “A Piñera le queda todavía un año de gobierno y ya está pensando en el “qué dirán”. Después de un año de pandemia, un millón de familias entró al Registro Social de Hogares, pero a Piñera le importa su “legado” y cómo será recordado. Pensar en esto hoy muestra crueldad y total indolencia hacia millones de chilenas y chilenos”, señaló.
Trascendió en los medios, que entre las acciones que Magdalena Díaz y un equipo de trabajo a su cargo que también integran otros funcionarios del Segundo Piso de La Moneda, analizan desarrollar para cumplir con el objetivo del presidente, está generar registros audiovisuales, edición de libros, registros digitales e incluso, una eventual autobiografía.
En ese sentido, el presidente del PRO señala que, “El verdadero legado de Piñera está escrito en los muros de todo Chile y en los rostros de centenares de mutilados por su gestión. No es necesario buscar más lejos” dice enfático.
Fuentes al interior del ejecutivo aseguran que para el mandatario este tema reviste particular importancia, y que dentro de sus objetivos está destacar el proceso de vacunación y la gestión sanitaria y económica hecha para enfrentar la crisis generada por la pandemia bajo su mandato. Al mismo tiempo, respecto del escenario que enfrentó durante el estallido social, buscaría relevar la disposición que él asegura haber tenido para llegar a acuerdos y la recuperación económica lograda después de ese complejo momento.
En ese escenario, Lagos analiza que el manejo de ambas crisis -social y sanitaria- por durante la gestión de Piñera, ha sido al menos cuestionable, teniendo consecuencias severas para un porcentaje importante de ciudadanos que todavía están muy lejos de superarse, razón por la cual el presidente y todo su equipo deberían estar centrados en avanzar en esas urgencias durante el último año de su gobierno, “En La Moneda se perdió toda la vergüenza. Piñera piensa en una autobiografía mientras millones de compatriotas intentan mantenerse a flote tras el año más duro de sus vidas”, finalizó.