“La unidad de los partidos de centroizquierda siempre es una buena noticia. Hemos aprendido que corriendo separados somos más débiles. Es difícil oponerse cuando un grupo de dirigentes se reúne en torno a ideas comunes”, señaló el presidente del Partido Progresista, Camilo Lagos, ante la aparición de una alianza de partidos de centroizquierda y el posterior debate que se ha dado con diputados DC respecto de excluir a otros partidos.

Al respecto, el líder Progresista señaló que “nos sorprende que se hable de Convergencia Progresista y que de inmediato salte la DC a vetar partidos, a plantear barreras; a construir muros en vez de puentes. La DC, en este sentido, está hablando de divergencia más que de convergencia. Eso es no entender lo que está pasando”.

De este modo, aclaró que en el Partido Progresista “fuimos los primeros en hablar de progresismo hace ya varios años. Saludamos que otras fuerzas se percaten hoy de la importancia de ser Progresistas, entendida como una izquierda moderna, de futuro, que lee el pasado para proyectarse hacia adelante”.

El líder del PRO recordó que si hay un partido que ha intentado “generar convergencia, ese es el Progresista. Fuimos los primeros en apoyar a Guillier en segunda vuelta. Construimos una alianza parlamentaria con el PPD y luego con el PC. A nivel internacional estamos asistiendo y conversando con fuerzas de todo el continente. El PRO es, en esencia, un partido dialogante y abierto. Por eso, una convergencia Progresista es con todos, o no será convergencia“.

Para concluir, Camilo Lagos indicó que el Progresismo en Chile “debe sacar lecciones de lo sucedido en Brasil. No basta con salir a pegarle a Bolsonaro. Eso es muy sencillo. Es evidente que es un misógino, homofóbico y con rasgos fascistas. El desafío es ver cómo y por qué asciende un político como él y qué camino de esperanza ofrecemos nosotros para encantar a la ciudadanía”, finalizó.