La Directiva Nacional del Partido Progresista de Chile, ratifica su posición de no ser parte de la consulta presencial mediante la cual se pretende resolver una candidatura presidencial única de los partidos de la centroizquierda, tal como lo comunicamos el domingo 25 de julio al resto de los conglomerados de Unidad Constituyente y el Partido Liberal – Nuevo Trato. Al mismo tiempo, hace un llamado a su militancia a mantenerse neutrales, a seguir trabajando por la plena unidad de las fuerzas de centroizquierda y progresistas en una sola lista parlamentaria y a fortalecer las listas de Consejeros Regionales en cada provincia.
Desde nuestra perspectiva, con el pasar de los días se ratifica nuestra decisión, debido a que sigue siendo un proceso altamente improvisado en el que transcurridas dos semanas, todas las advertencias sobre los problemas que visualizamos y expusimos siguen sin poder ser resueltos.
Nuestras razones fueron claras e inobjetables: improvisación en su organización; problemas incorregibles y graves con el padrón electoral a utilizar; probable imposibilidad de foliar votos; costos altísimos del proceso (se estimaba en $500 millones, lo que significaba $125 millones por candidatura en el caso de presentarse cuatro candidaturas, más los costos propios de una campaña electoral); intentos de veto a nuestra posible carta presidencial; entre otras razones.
Cabe destacar que también fuimos claros al señalar que nuestra decisión de no participar de esta improvisada instancia, no implica intención alguna de romper con la unidad ni de no respetar la decisión de nuestros aliados de concurrir a esta consulta. Por el contrario, señalamos que seguiríamos siendo parte del esfuerzo de unidad de la centro-izquierda y el progresismo, siendo parte activa de la construcción de una lista unitaria para las elecciones parlamentarias de noviembre próximo y fuimos enfáticos en señalar de que no haríamos nada que pudiese torpedear el proceso, dejando claro que tampoco seríamos parte de él en la figura del apoyo a una determinada candidatura ni llamando a participar en la consulta.
Todos los partidos de la Unidad Constituyente y Partido Liberal-Nuevo Trato, entendieron las razones esgrimidas y aceptaron la decisión del Progresismo de no ser parte de este proceso.
El Progresismo estará en la unidad y a su debido tiempo anunciaremos nuestra decisión presidencial. Hoy nos ocupa trabajar en un sólido programa de emergencia para el próximo período presidencial, que tal como lo hemos señalado e incluso presentado en un proyecto de ley al respecto, creemos que por vez única debe durar dos años, de modo de acompañar lealmente de proceso constituyente. También seguimos acompañando la digna batalla judicial que da nuestro compañero y fundador del Partido, Marco Enríquez-Ominami, por demostrar su absoluta inocencia en un juicio absurdo sobre la rendición electoral del 2013, la que fue aprobada por el Servicio Electoral en su momento y, al mismo tiempo su batalla -que es nuestra batalla- por recuperar sus derechos políticos, suspendidos por fiscales de una imparcialidad dudosa, con el claro objetivo de dañar a quien los que hoy ostentan el poder, ven como un adversario político.
Estamos convencidos de que saldremos victoriosos de esta batalla y que, llegado el momento, tomaremos juntas y juntos la mejor decisión para el progresismo y seguir profundizando el cambio en Chile, acompañando el gran momento constituyente que vive nuestra patria y evitando la continuidad de la derecha empresarial que hoy personalizan Sichel y Piñera.
Adelante, con todas las fuerzas de la historia.
DIRECCIÓN NACIONAL
PARTIDO PROGRESISTA DE CHILE