Cuando Luis Cortés Hernández llegó a la Región de Aysén en 1983, lo hizo buscando oportunidades laborales, pero la magia de sus paisajes y su gente lo enamoraron y terminó quedándose para siempre, en ese lugar donde nacieron sus hijos, que hoy son su bien más preciado.

Desde muy temprana edad vio en la vida política un camino necesario para poder ser parte de la construcción de una sociedad más justa, por eso, fue dirigente estudiantil durante tres años en su paso por la carrera de construcción civil en la universidad.

En sus inicios profesionales, se aventuró con una empresa constructora. En 1996 fue elegido concejal por la comuna de Coyhaique y en 2003 fue nombrado intendente por el gobierno de Ricardo Lagos, cargo en el que se desempeñó hasta septiembre de 2004.

De un tiempo a esta parte, desarrolla proyectos de loteo (parcelas) con una sociedad inmobiliaria familiar y hoy se presenta como candidato independiente a Gobernador por la Región de Aysén, con el apoyo del Partido Progresista. 

¿Por qué decidió ser candidato a gobernador?

Por que creo, con mucha humildad, pero con fuerza, que sí es posible cambiar la forma de hacer las cosas en nuestra región, me refiero a las políticas públicas.

El mundo ha cambiado, Chile ha cambiado, y desde las regiones se pueden impulsar nuevas leyes para reemplazar otras que lo único que hacen es revelar injusticias sociales. Por ejemplo, en nuestra región, el tema energético opera con leyes que están hechas para que el monopolio eléctrico que nos ahoga, continúe desarrollando su negocio a costa de todos los habitantes que vivimos en Aysén, sometidos a una matriz energética que ya no puede seguir como está.

Tenemos contaminación atmosférica generada por el consumo de leña, es urgente cambiar de estrategias, no podemos continuar con una matriz energética que daña día a día a nuestra gente, sobre todo porque los más perjudicados son los niños y adultos mayores. Este tema lo podemos abordar entre todos, existen muchos estudios que avalarían lo que digo y por lo tanto serían un fundamento claro y objetivo para generar estos cambios.

Como gobernador ¿Cuáles serían sus principales luchas?

Lo primero es el tema energético, que sin duda será una lucha. Me gustaría ciudadanizar el tema de la energía, obtener los consensos con las fuerzas vivas de la región, escuchar, tengo experiencia en eso porque fui concejal por la comuna de Coyhaique, la gente me conoce. Mis planteamientos al respecto no son nuevos, siempre he sido claro en mi punto de vista acerca de cuál sería la forma de reemplazar la leña en la matriz energética que nos hace daño. Debemos consultar más expertos y ser ágiles en esto porque la gente nos estará supervisando. Basta de retórica, es necesario generar acción entre todos y estamos optimistas al respecto.

Otra lucha importante que tengo en lista, es definir un eje de desarrollo que se centre en el ecoturismo inclusivo. Vivimos en una hermosa región y si se establece un eje de desarrollo claro, todas las demás actividades se desarrollarán de manera ordenada y acotada. Esto requiere de una definición fundamental sobre la manera en que visualizamos las propiedades naturales de la región, su carácter productivo y con ello, la infraestructura indispensable para viabilizar dichas actividades y la inclusión efectiva de las personas en todas las áreas, para -finalmente- lograr visibilizar una región ordenada y atractiva.

Si pensamos ambiciosamente, estas iniciativas nos permitirían mostrarnos como región modelo para el resto del país, como un territorio que, a partir de su identidad, se integra  al mundo con su economía y su cultura, con la certeza de estar caminando sobre sus propios pies porque ha conquistado sus raíces.

¿Tiene ya alguna idea de programa para presentar a los votantes de la región?

Estamos afinando detalles, en reuniones virtuales con gremios, industriales, sindicatos, etc. Al momento de la inscripción de esta candidatura, presentamos un programa con un ideario base: una región que garantice los derechos de sus habitantes. Derecho a la educación, salud,  vivienda y en consonancia a lo dispuesto en el artículo 11 Nº1 del Pacto Internacional de Derechos Económicos Sociales y Culturales, tratado internacional suscrito y ratificado por Chile en el que el Estado reconoce el derecho de toda persona a tener un nivel de vida adecuado para sí y para su familia (incluyendo alimentación, vestimenta y vivienda), y a una mejora continua de sus condiciones de existencia.

Desde su perspectiva actual ¿Cuáles serían los compromisos más urgentes con la región, entendiendo que los temas regionales más importantes no necesariamente se vinculan a temas ideológicos?

No se vinculan necesariamente a temas ideológicos y eso es bueno.

En nuestra región somos pocos y nos costará menos consensuar. Me gustaría decirles a mis compatriotas que vivimos en Aysén, que mi gestión tendrá su origen en la idea de que el desarrollo y crecimiento de una sociedad más justa, descansa  en la sustentabilidad humana, que -a veces- parece escondida o simplemente olvidada. Acercar el Estado a las personas de carne y hueso es fundamental para la toma de decisiones. Así lo hice cuando fui Intendente de la región.

Aysén es una región extensa, pero cuenta con una densidad poblacional muy pequeña, con un Estado poderoso y un sector privado que empuja, pero que aún dista de convertirse en el motor de crecimiento de la región.

Estoy convencido de que aquí, el Estado y el gobierno de turno, tienen la inmensa posibilidad de construir una región que, pensada desde la estructura del gobierno regional, con lineamientos claros y consensuados, es posible convertir en una región desarrollada en un plazo de diez años. Tal vez no exista otra región en el país que permita realmente pensarla desde la perspectiva de cómo debiera ser el lugar donde nos gustaría vivir, como sí lo es en el caso de la nuestra, una región que nos lleva a ilusionarnos al pensarla desde el regionalismo de verdad que comienza a plantearse.

Podremos decir después a muchos escépticos que, en medio de la modernidad que arrebata, la inseguridad, la angustia de las urbes y la soledad colectiva, es posible soñar que pronto Aysén comenzará a vivir una experiencia de construcción social y económica, en donde nos podremos sentir más felices y plenos.

¿Qué lo diferencia de otros candidatos al cargo?

Sobre todo, la experiencia y mi trabajo con las organizaciones de base en mis tiempos de concejal. Conozco la región a fondo, por mi profesión de constructor civil me ha tocado trabajar en todas las localidades, incluso, en sectores apartados.

Además, mi experiencia como ex Intendente, donde aprendí que es posible realizar acciones concretas consensuando nuestras miradas, definiendo juntos hacia donde queremos ir, cuáles serán nuestras prioridades y que para eso, es prioritario escuchar a las organizaciones sociales y gremios.

Tengo claro que el trabajo de gobernador regional lo haremos con las y los consejeros, porque son el contacto con los ciudadanos en sus respectivas provincias, y veo en muchos de ellos, fuerza regionalista en acción y entrega en pro de una vida mejor para todas y todos.