- Este jueves, el excandidato presidencial expondrá su versión ante el Cuarto Tribunal Oral en lo Penal de manera remota, luego que se rechazara la solicitud de su defensa –encabezada por los abogados Ciro Colombara y Carlos Mora- para que esta se realizara de manera presencial, aludiendo a la falta de garantías constitucionales que representa el proceso vía Zoom.
- Paralelamente, hoy se conocieron los alegatos de apertura de la defensa, que apuntaron a la inconsistencia de la acusación y a la responsabilidad que le cabría al administrador electoral en caso de existir irregularidades en la rendición de gastos ante el Servel, recalcando que, respecto de la campaña presidencial de 2013, ésta fue aprobadas por el organismo electoral al acreditarse la existencia de los trabajos y los contratos que los respaldan.
Para este jueves a las 9:00 horas está programada la declaración ante el Cuarto Tribunal Oral en lo Penal de Marco Enríquez-Ominami, en el juicio por presunta infracción electoral que lleva adelante el Ministerio Público.
Ello, luego que el excandidato presidencial renunciara a su derecho a guardar silencio para exponer ante los sentenciadores, su versión de los hechos.
El testimonio de Enríquez-Ominami se llevará a cabo a través de zoom y no de manera presencial como buscaba su defensa –encabezada por los abogados Ciro Colombara y Carlos Mora- luego de que el tribunal rechazara su solicitud de postergar el juicio hasta que pudiera retomarse de manera semipresencial, aludiendo a la falta de garantías constitucionales que representa el proceso vía remota.
En la instancia de hoy, además, se conocieron los alegatos de apertura de la defensa, que apuntaron a la inconsistencia de la acusación y a la responsabilidad que le cabría al administrador electoral en caso de existir irregularidades en la rendición de gastos ante el Servel, recalcando que, respecto de la campaña presidencial de 2013, esta fue aprobada por el organismo electoral al acreditarse la existencia de los trabajos y los contratos que los respaldan.
“Al fin estamos acá, ante ustedes, ante un órgano imparcial, para solicitar la absolución de mi representado Marco Enríquez-Ominami”, dijo al inicio de sus alegatos Carlos Mora, aludiendo a los casi siete años que lleva el proceso en curso.
“Cuando una persona es objeto de persecución durante tantos años, teniendo la certeza de que es inocente, entiendo cómo sus proyectos tanto familiares como profesionales se estancan”, agregó el defensor, mencionando que en la vida familiar de su representado “se vive en constante preocupación y estrés”.
“Es muy difícil poder sobrellevar una vida normal, he sido testigo de ver a una persona, a mi representado, con impotencia, frustración, sentimiento de persecución desigual ante el Ministerio Público, y hoy comienza el fin de esta pesadilla, hoy comienza el esperado juicio oral, y sin perjuicio del resultado de éste, lo vivido por mi representado en estos últimos 6 años ha sido una condena. A veces la espada de Demócles es peor que la guillotina”, recalcó Mora.
Y argumentó: “Primero, porque este caso es conocido como el famoso caso del avión respecto del cual se rendirá profusa prueba, pero que -de acuerdo a los dichos de la propia fiscal- no tiene condición delictiva. Gran parte de la prueba de este juicio sobre fraude de subvenciones, versará sobre un avión que no tiene condición delictiva porque no fue rendido y si no es rendido, no tuvo subvención, por lo tanto, este es un avió que sobrevolará este juicio en área restringida”.
“La segunda razón es, porque de acuerdo al artículo 30 y 31 de la ley 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control de Gasto Electoral, la responsabilidad sobre el control del ingreso y gastos electorales recae en el administrador electoral. La única posibilidad para que la responsabilidad recaiga en mi representado o en el candidato en este caso, es cuando él no designara a un administrador electoral, lo que -de la sola lectura de la acusación- podemos apreciar de que no fue así”, agregó Mora, enfatizando que “en todas las campañas presidenciales investigadas hasta la fecha por la fiscalía de alta complejidad, se investigó al administrador electoral”.
“Por ejemplo, no se investigó a la presidenta (Michelle) Bachelet, se investigó a su administrador electoral. El Ministerio Público de la zona oriente no investigó, no formalizó ni acusó al presidente (Sebastián) Piñera, sino que se investigó a su administrador electoral. Mi representado es el único candidato en la historia de Chile directamente investigado en circunstancias que la responsabilidad no recae en el en candidato”, dijo, aclarando que “con lo dicho, no digo que el administrador electoral tenga responsabilidad de nada en los hechos que se encuentran acusados, solo señalo que es imposible condenar a una persona por hechos que no son de su responsabilidad conforme a la ley”.
“Los candidatos hacen campaña, los administradores administran, los jefes de campañas, gestionan, eso está en la ley”, reiteró Mora, mencionando que “en este caso, no fue formalizado el administrador electoral que tenía bajo su responsabilidad el control de los ingresos y gastos electorales y que –además- presentó la documentación cuestionada por la fiscal. Y lo que es más incomprensible, ni siquiera está citado por el Ministerio Público a este juicio como testigo”.
Caso inédito
Durante sus alegatos, al abogado Carlos Mora también aseguró que “este caso es inédito porque cuando el Servel fiscaliza la rendición de la cuenta del año 2013, y luego de pedir –incluso- aclaraciones, aprueba el gasto electoral de la candidatura presidencial. Y la razón fue muy sencilla, se acreditó la existencia de los trabajos y los contratos que lo respaldan”, dijo, puntualizando que “solamente por la denuncia de un grupo de políticos antagónicos a mi representado, se inicia esta causa. Esperamos que se presenten a este juicio para que nos expliquen el motivo y las motivaciones para esta denuncia”.