El candidato presidencial de las y los Progresistas, declara que no está a favor del voto obligatorio, señalando que el derecho a sufragio es una conquista que hace al país más grande y que por lo tanto, decidir no ejercerlo, es también un derecho que debe ser respetado.
Hoy se discute en la Sala del Senado el proyecto de ley que busca reponer el voto obligatorio en segundo trámite constitucional, el que ha sido bastante cuestionado debido a que conserva la inscripción automática, pero sin embargo no propone un mecanismo de desinscripción voluntaria.
En ese escenario y como parte del paquete que compone el proyecto, la presentada para establecer un procedimiento de desinscripción voluntaria y temporal, no obtuvo el quórum necesario para aprobar la idea de legislar, con 87 votos a favor, 28 en contra y 24 abstenciones, quedando la propuesta archivada, con impedimento de legislar sobre esta misma materia hasta pasado un año, tal como lo establece la actual Constitución.
Respecto a la restitución del voto obligatorio, el candidato presidencial Marco Enríquez – Ominami, se declara en contra: “No apoyo el voto obligatorio, creo que el voto es esencial a la democracia, es una conquista reciente, más reciente aún para las mujeres, y es un gran logro, hace al país más grande, hace al país más justo”, agregando que, “Votar es un derecho que debemos ejercer aunque no es una obligación, porque votar es una seña y no votar también es la expresión de una opinión, de una decisión democrática”, dijo.
El líder del Partido Progresista de Chile (PRO), basa su argumentación en la certeza de que sufragar es un derecho, “Por eso el voto debe ser voluntario, debe ser un derecho, un deber, no una obligación y desafío a quienes están por el voto obligatorio a que no mientan, digan exactamente cuál es la multa, la pena o el castigo para quien no ejerce su derecho a votar, para quien opta por no votar, lo que también es un derecho”, sentencia.