Durante este último tiempo el Partido Progresista concretó reuniones bilaterales con dos partidos de la concertación: el PPD y el PRSD. En ambas conversaciones se dieron dinámicas bastante similares, los partidos mencionados hablaron de la necesidad de una convergencia opositora y de su compromiso con las primarias
Durante este último tiempo el Partido Progresista concretó reuniones bilaterales con dos partidos de la concertación: el PPD y el PRSD. En ambas conversaciones se dieron dinámicas bastante similares, los partidos mencionados hablaron de la necesidad de una convergencia opositora y de su compromiso con las primarias, y el PRO, respondió en ambas ocasiones que la concertación no nos convoca, porque creemos que es un proyecto agotado, y que para cualquier tipo de acercamiento electoral entre partidos es primordial el desarrollo de tres puntos: respeto mutuo, acuerdos programáticos y primarias vinculantes en todo el país. Sin duda ambas reuniones generaron un primer acercamiento entre fuerzas opositoras, pero hay que aclarar que de ellas no surgió ningún tipo de acuerdo ni para el corto, mediano o largo plazo.
Pero, en este debate abierto que se da sobre las primarias, El Vicepresidente de Organización Regional del PRO, Ricardo Godoy señaló que, “aparecen dos “pequeñas sutilezas” que van de la mano y que en este momento vale la pena aclarar, porque sin duda ambas marcan nuestra identidad progresista y la línea de la dirección del partido”. Lo primero es que diversos personeros hablan en los medios indistintamente de pactos y proyectos, y Godoy agregó, “las primarias no son sólo un tema de forma para nosotros, son también un tema de fondo que tiene un tiempo mínimo que se debe respetar”.
Queremos aclarar que para nosotros un pacto es un acuerdo entre quienes se reconocen distintos, pero que tienen la voluntad de resolver un conflicto común mediante una relación instrumental. Por tanto dicho camino es entre actores que no tienen objetivos idénticos, pero si están dispuestos a autoregular sus demandas con el fin de alcanzar un resultado electoral favorable. Ese ha sido el camino de la derecha, y el actual camino que sostiene la concertación desde finales de los 90s. En tanto, un proyecto implica un desafío mucho mayor y complejo, es la generación de una voluntad general capaz de establecer cambios, transformaciones o reformas en el sistema político, social y económico nacional. Por eso no nos perdemos, no es lo mismo hablar de pactos ante quienes tienen como identidad un doble quiebre político- ni con la derecha, ni con la agotada concertación-, menos aún cuando es la misma ciudadanía la que le pide a gritos a la centro izquierda una nueva hoja de ruta. Hablaremos de futuro pero hablando de presente, y es justamente en este presente es en donde decimos fuerte y claro proyecto.
Sobre las primarias, es claro que el PRO no nace sólo ante la necesidad de ser una alternativa a los conservadores de derecha, sino también por la profunda convicción de reaccionar ante aquellos conservadores que se encuentran en la centro-izquierda. Por lo mismo reiteramos a la opinión pública lo que hemos dicho una y otra vez en este año, las primarias deben ser vinculantes en todo el país, pero deben ir de la mano de mínimos acuerdos programáticos que garanticen que quien resulte electo sea representativo de quienes participan en dicha instancia. Sin garantías de quienes participan, con reglas establecidas de forma unilateral, sin respeto mutuo, sin espíritu federal, sin que sean vinculantes en todo el país, sin un mínimo reconocimiento entre quienes participan, el PRO ya hizo saber al PPD y al PRSD que tiene una sola respuesta…NO ESTAREMOS.
Para Camilo Lagos, Vicepresidente de Asuntos Programáticos del Partido Progresista, hay temas de fondo y no sólo electorales, “ganar un municipio a través de líderes que no se comprometen con la píldora del día después, con la educación pública, con el medio ambiente, con la participación ciudadana, con la salud pública, con la cultura, puede ser para algunos un avance electoral de la oposición, pero para nosotros, es simplemente validar el retroceso ético que nos llevo al doble quiebre el 2009”. Por eso las primarias no son sólo mecanismos para regular la competencia, son un tema de fondo, son la base mínima que se debe establecer si realmente se desea avanzar hacia un nuevo ideario progresista.
Por lo mismo, al alero de la convicción de reconstruir un proyecto de centro izquierda que re-encante a la ciudadanía, reiteramos el llamado que hemos hecho durante todo el 2010 y 2011, superar la lógica pactista, que sea la discusión de ideas y no la de cuotas las que nos hagan converger a cualquier primaria. Chile NO necesita una convergencia opositora, es un país que pide a gritos una convergencia programática, y para aquello estaremos dispuestos a estar siempre…pero ojo que el tiempo corre, y nuestra primera responsabilidad es con la ciudadanía, y no estaremos si los tiempos no permiten una verdadera fiesta democrática de Arica a Punta Arenas.