“Reconocemos el voto negativo del Intendente Ulloa, es una señal clara de los graves riesgos del proyecto”, manifestó el senador Alejandro Navarro, tras la polémica votación sobre el proyecto que Biodiversa, filial de Essbío, busca extender en la comuna de Cabrero.

“Sin embargo”, continuó, “lamentamos que los Seremis del Biobío hayan aprobado la ampliación de la planta de excrementos; no lograron comprender que la economía de la región completa está en juego”.

El parlamentario señaló que, “la votación en el Gobierno Regional del Biobío deja sin duda contenta a la empresa, pero va en contra de lo que los miles de cabrerinos y cabrerinas, el concejo municipal y los parlamentarios estamos pidiendo, esto es, el rechazo al proyecto de ampliación de la planta de caca”.

“Por ello quiero recordar que hace un par de semanas enviamos una carta a Sonny Perdue, Ministro de Agricultura de los Estados Unidos, en la cual le explicamos lo que está ocurriendo en Cabrero, poniendo énfasis en lo que significaría para las exportaciones de frutas entre Chile y su país, la ampliación de esta planta de excrementos”, agregó.

“Pues desde el Sitio de Inspección Fitosanitaria de Cabrero, se exportan miles de toneladas de frutas del Biobío, el Maule y la Araucanía directamente a Estados Unidos, sin pasar por aduana, creando una cadena de valor que involucra a miles de personas, entre agricultores, trabajadores de la Certificadora, transportistas, estibadores y tantos otros que participan del proceso productivo chileno”, añadió.

Para Navarro, “pero los Seremis parecen no haber tomado esto en consideración, ni que la Certificadora se encuentre a 6 kilómetros de la Planta de Caca, ni que los camiones con excremento pasen apenas a 50 metros de distancia de este Sitio de Inspección”.

“Es bueno hacer memoria”, prosiguió, “ya que en Freirina se aprobó, se construyó y se puso en financiamiento una planta faenadora de cerdos de Agrosuper, provocando una crisis medioambiental que tiempo después, desembocó en que la empresa tuviera que paralizar sus operaciones, cerrando la planta y perdiendo con ello millones de dólares”.

“Por ello su alcalde, César Orellana, y quien lideró aquella fuerza ciudadana que luchó y luchó hasta que cerró la planta, vendrá al Biobío a aportar con su conocimiento, a hablar con la gente de Cabrero, porque esta votación en el Gobierno Regional no detendrá la movilización”, aseguró.

El senador por la Región del Biobío finalizó señalando que, “hace algunos años, bastó que encontrasen solo dos gajos de uva contaminados con arsénico, para paralizar toda la producción chilena de dicha fruta al extranjero”.

“Por ello, me pregunto, ¿qué pasará cuando llegue a los Estados Unidos un envío con frutas del Biobío, y encuentren en él moscas de la Planta de Caca de Cabrero?”, sentenció.