Un crudo análisis del manejo que se ha hecho del Transantiago realizó Jaime Parada, vocero de la candidatura presidencial de Marco Enríquez-Ominami.
“Cuando pensábamos que sólo las candidaturas de la Concertación y la Alianza estaban involucradas en el mal manejo del transporte público de la capital, ahora nos enteramos de las asesorías de mala calidad hechas por Franco Parisi, según Raimundo Cruzat, ex coordinador del servicio. Cuando todo parecía mucho, se vincula a Parisi al proyecto de transporte público más desastroso que haya conocido Chile”, señaló Parada, concejal (PRO) de Providencia.
Un crudo análisis del manejo que se ha hecho del Transantiago realizó Jaime Parada, vocero de la candidatura presidencial de Marco Enríquez-Ominami.
“Cuando pensábamos que sólo las candidaturas de la Concertación y la Alianza estaban involucradas en el mal manejo del transporte público de la capital, ahora nos enteramos de las asesorías de mala calidad hechas por Franco Parisi, según Raimundo Cruzat, ex coordinador del servicio. Cuando todo parecía mucho, se vincula a Parisi al proyecto de transporte público más desastroso que haya conocido Chile”, señaló Parada, concejal (PRO) de Providencia.
“Se trata de un modelo hecho por técnicos, entre cuatro paredes, que no contempló a la gente en lo más mínimo. Parisi, el asesor, el autoproclamado ‘candidato de la gente’, fue parte de un diseño que hoy tiene a esa misma gente con una calidad de vida precarizada”, enfatizó el vocero.
Parada enfatizó: “El problema es de fondo. La Concertación creó un monstruo. Uno que le salió carísimo al Estado, pero especialmente a los millones de santiaguinos afectados. Esto porque no se ha entendido que el transporte público, por tratarse de un servicio vital, debe ser estatizado, tal como lo propone la candidatura de Marco Enríquez-Ominami”.
“Los privados no han dado el ancho en esta materia y eso hay que reconocerlo. ¿Problema de diseño? Sí ¿Problema de administración? Sí. Pero por sobre todo, de visión de sociedad. El Transantiago es la mejor muestra de que se gobernó durante los años de la Concertación con la visión de Pinochet, una en la que el Estado poco y nada tenía que opinar sobre los servicios y bienes sociales”, agregó.
“La Alianza hizo lo propio. En 4 años las mejoras del servicio han sido mínimas. Tanto que hoy pocos notan la diferencia. El actual jefe programático de la candidata Matthei, de hecho, tuvo un triste paso como Ministro de Transportes del actual Gobierno. Pese a ello, no hicieron movimiento alguno por traspasar la propiedad al Estado, aun sabiendo la ineficiencia del sector privado en este ámbito. No es que seamos híper estatistas, porque en otras áreas creemos en el rol de los privados, pero no en éste. Creemos que la mayoría de los chilenos tampoco”, concluyó.